Desde Gante,... con todo mi cariño

Se que deberia empezar. Empezar a relatar mi vida de Erasmus, que en realidad es lo que se espera de alguien que, lejos de la vida que siempre le ha acompañado, se dedica a dar sus primero pasos en la vida adulta... una vida que aun no estoy dispuesta a aceptar.

A veces pienso que me gustaria ser como Peter Pan, y vivir atrapada en la infancia para siempre. No me gusta crecer. No me gusta ver lo injusto que puede llegar a ser este mundo. No me gusta derramar lagrimas por la gente que quiero, pensando en que mañana igual no estan. No me gusta apagar la luz y quedar tendida en la más completa soledad sabiendo que estoy rodeada de gente... Tengo miedo al Mañana.

De momento prefiero ver el Ayer y disfrutar el Hoy. El Hoy en esta tierra tan lejana del hogar.

Por eso mi primera entrada esta dedicada a mi tierra, Santander. A sus atardeceres. A sus playas. Pero, mas que nada, a su gente. A los amigos que se quedaron, con la esperanza de un reencuentro. A la familia que, paciente, se resigna y espera nerviosa una llamada que alivie sus miedos. A los que confian en nosotros y en nuestra madurez. Pero, sobre todo, a aquellos que pensaron que nunca seriamos capaces de hacerlo.

A todos ellos, os quiero. Desde Gante,... con todo mi cariño.